Etiquetas
En este blog, ya ha aparecido en varios artículos el término sutil; incluso nuestra querida hadaraña tiene un artículo en el que aparece dicho término.
Por lo que nos ha parecido interesante publicar un artículo propio en donde desarrollamos cómo entendemos este término en este blog. Como el camino se demuestra andando, creemos que se podría considerar un estilo con las siguientes fases:
Ambientar
Las cosas no vienen solas; generalmente, siempre hay avisos previos de los que no somos conscientes. Pero cuando la situación ya se ha dado, se ven con más claridad.
Sin hacernos trampas al solitario, se pueden ver una serie de detalles que rodean cualquier situación.
Aceptar
Como diría Murphy, los problemas ni se crean ni se destruyen, solo se transforman o se camuflan.
Sin llegar a planteamientos zen, si no se tienen en cuenta los elementos con los que tenemos que enfrentarnos, muy difícilmente se puede establecer cualquier tipo de táctica.
Nunca hay que olvidar que aceptación no significa resignación. Simplemente es darse cuenta de lo que tenemos delante.
Etiquetar
Con distintas denominaciones, en cualquier situación hay una serie de repeticiones que para no buscar otro término, llamaremos etiquetas.
Uniéndolo al punto anterior, las etiquetas son los elementos más repetidos de una situación. Puede que no podamos con todos; una mínima jerarquización nos podrá hacer ver cuáles son los que están más alcance de nuestra mano.
Conviene conocer también nuestras propias etiquetas. De esta forma, tendremos más claridad sobre aquello que podemos hacer ante las diferentes situaciones.
Surfear
A falta de mejor expresión, el juego de etiquetas anteriores se pueden utilizar a modo de tablas de surf ante las olas del proceloso océano caótico que tenemos debajo.
Es como surfear al borde del caos.
Del post de referencia podemos sacar este proceso:
Actuar –> Sentir –> Responder
Transcribo:
No se conocen relaciones causa-efecto. En el espacio caótico, lo más importante es actuar, luego sentir y reaccionar en consecuencia. Estar en este dominio no resulta cómodo y puede conducir a altos niveles de estrés. Sin embargo, si se gestiona bien, se pueden encontrar beneficios ya que es el entorno más creativo donde los agentes tenderán a aportar nuevas ideas que contribuyan a su propia supervivencia.
Resumir
Todo se resume a un juego de etiquetas personales y de situación que se utilizan a modo de tablas de surf sobre las olas del caótico mar en que nos está tocando vivir.
Espinita (Los Panchos)
Y hasta aquí el artículo; seguro que con tus comentarios podremos añadir más detalles y matices.
Bueno, yo creo que mi estilo no es sutil, más bien todo lo contrario.
Pero en la variedad está el gusto y se agradecen los estilos no similares al mío. Me gusta ver que las cosas que a la gente le mueven, en lo que más se fija, porque aprendemos los unos de los otros 🙂
Como buena maña que eres, es difícil que seas sutil. Pero lo que te falta de sutileza, lo compensas con nobleza; que es también una cualidad de las mañas 🙂
¡Muy buen artículo! Y ya que habla de sutileza, no podía por menos que ser… ¡sutil!
Me ha encantado la forma de expresar cómo fluye el estilo, a través de tantas fases, todas ellas también muy… sutiles.
Y creo que lo más bonito, y fascinante, y arriesgado, y valiente, y satisfactorio que se puede hacer en la blogosfera (o en la vida en general) es intentar buscar la personalidad propia frente al «proceloso océano caótico».
Es tan fácil conversar y fluir con #Bolboreta que todo lo demás sale solo…
Entre el ambiente y surfeo (que también es una forma de solfeo) debe haber un espacio para esa pasión que se destila gota a gota. Mientras que entre gota y gota saltan las vocales dando como resultado un gato de nombre Misitu Kutsi o #Misitu para los amigos. 😉
Nos tienes que presentar un día a ese gato que llevas dentro… aunque supongo que no comentará en todos los blogs…
Me encantan tus expresiones. Y esa de surfear en el borde del caos…..Bueno, es genial. Yo no soy nada sutil. Soy más como un Elefante en una cacharrería o, como decía un amigo mío. «Toda una Miura». La sutileza no es lo mío, lo dejo para las damas de la alta sociedad.
El concepto de sutileza que queremos desarrollar no tiene tanto que ver con las damas de la alta sociedad, sino más bien sobre cómo conseguir buenos resultados con escasos medios. Podríamos haber puesto también estilo precario; pero las arañas gugleras hubieran enviado el artículo a otros rincones de la red.
¡Expectacular post!
Habéis definido el término sutil con una sutileza que seduce a cualquier visitante que se acerca a la telaraña de la hadaraña y al empoderamiento del ratón.
Quizás mi estilo no es ser sutil, aunque digo cosas sutilmente con la intención de apoderar el karma en todos los rincones blogueros 🙂
Un abrazo!
Ayer publicó Carlos Girón un artículo sobre la guía de estilo. Independientemente de lo sutil que seamos cada cual en nuestros respectivos blogs, en alguna forma, ya estamos blogueando en red.
Estamos preparando ya una guía de estilo para la hadaraña en la que obviamente, contamos con vuestra colaboración. Vamos a intentar utilizar las herramientas más sencillas para que pueda participar el mayor número de personas.